Horóscopos

   Antes sí. Antes no podía evitar la tentación y sucumbía casi a diario. Pasaba las hojas del periódico e inevitablemente acababa deteniéndome ante la sección del horóscopo.

   Acuario: "Recibirás una llamada que te inquietará y emocionará a partes iguales. Tendrás que decidir si arriesgarte o no. Recuerda que vivir y experimentar siempre conlleva aprendizaje, así que debes ser tú quien se dé cuenta de qué es lo importante ahora".

 No es que creyera a pies juntillas en sus predicciones, ni que mi vida girara en torno a aquellas frases que servían tanto para un roto como para un descosido. Pero me entretenían un rato, pensando, tratando de averiguar el mensaje oculto en tan crípticas elucubraciones.

   Con el tiempo perdí interés en mirar sus consejos para mañana. Pues otro tanto me está pasando últimamente con las encuestas electorales, esas que predicen cuántos escaños subirá o bajará tal o cual partido. No sé si quedan ya quien se las crea a pies juntillas. De entrada, como en el caso de los horóscopos, el resultado previsto varía tanto de un medio de comunicación a otro que ya me hace dudar de la bondad del método estadístico empleado. Comprobado queda que, en su inmensa mayoría, fallan más que una escopeta de feria.

   Por eso he decidido que, en adelante, voy a hacer como hago con los horóscopos… pasar página e ir directamente a la sección de deportes.