Doquiera que va encuentra problemas. Ante cualquier cosa que se le encarga le surgen dificultades para realizarla. Hace pocos días escuchaba, junto a él, una conferencia, y a pesar de las buenas noticias que se estaban comunicando, observé como su rostro, sus gestos faciales, denotaban malestar, contrariedad, enfado. No ssí el conferenciante y el resto de la sala. Todos nos concentramos en el núcleo central de lo planteado que resultaba positivo, salvo mi amigo que le encontró unos cuantos peros.
"Bastantes contrariedades tiene ya la vida -le comenté- para no aprovechar un momento de alegría". Los problemas y las dificultades de cada día, si los afrontamos con humor, no solo serán más llevaderos, sino que algo más de alegría sembraremos a nuestro alrededor -que falta nos hace-. Y el silencio fue su respuesta. Algo así como un mutis por el foro.
Personas pesimistas e incluso tóxicas ...hay que buscarle la gracia a la desgracia dejando que las alegría compensen esa negatividad de poca monta.
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