Es un criterio aceptado universalmente que la paciencia es la madre de la ciencia ¿Y Dónde tuvo lugar ese parto? Por otra parte, es de suponer que junto a la madre ha habido también un padre. Y no podía ser cualquier padre. Un impaciente desbocado tipo San Blas no tiene pinta de hombre paciente. Tampoco tiene pinta de serlo San Pedro o su colega San Pablo, ocupados de país en país fundando su partido.
Sí, pudiera haber sido Jesús de Nazaret, pero si es cierto que una persona que habla tanto de la importancia de la familia no se va a hacer cargo de una paternidad responsable cuando él estaba de pueblo en, pueblo llevando el café los suyos y preocupado por lo mal que laboralmente le iba a su esposa.
Seguro que todos hemos pensado en el santo Job. Cualidades y mérito no le faltan. Y ha sido considerado durante muchos siglos como el mejor modelo de paciencia, antes de Jesucristo.
Que nosotros sepamos, no hay doctrina segura sobre el tema y serán las nuevas tecnologías las que se ocuparán de la pertinente solución. A nosotros solo nos toca convencernos de que la paciencia es una cualidad necesaria en la vida. Y ejemplos de ello los tenemos a borbotones
De ello más que convencidos los representantes del saber tales como Emmanuel Kant, filósofo (“La paciencia es la fortaleza del débil y la debilidad del fuerte”) o científicos como Franklin ("Quién tiene paciencia obtendrá lo que desea”) y poetas como Neruda, quién dejo dicho "Sólo con una ardiente paciencia conquistaremos la espléndida ciudad que dará luz, justicia y dignidad a todos los hombres. Así la poesía no habrá cantado en vano".
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