Tuve un ideal
que aglutinó mí vida, y hoy no me acuerdo cómo definirlo. S que el mundo está
progresando y que los cambios positivos dejan buen olor en el entorno.
Amaba con
intensidad y mi pasión ardía. Hoy miro con pena cómo los vientos y tempestades
se lo han llevado y no he sabido aprovechar los momentos de calma para volver a
encender el fuego.
Sin embargo,
sigo teniendo sed de avanzar y de saber fijamente que todo volverá a ser
posible si yo quiero. Y quiero.
No hay comentarios:
Publicar un comentario