El hombre puede
trabajar. La mujer a su casa a preparar
la comida para que el hombre al llegar a su casa tenga la recompensa por su
trabajo.
El hombre va a hacer la
compra. Dicta lo que hay que comprar. La mujer le acompaña para cargar el cesto
de la comida.
El hombre sale a tomar algo
con los amigos -o simplemente a hablar-. La mujer se queda en cada rezando o
viendo la tele.
El hombre en la playa va lo
normal: con ropa de baño y al agua. La mujer con traje largo y la cabeza
cubierta. Ha de cuidar no se le vean las pantorrillas.
El hombre puede casarse con
varias mujeres. La mujer con un solo hombre.
El hombre elige con quién
casarse. La mujer no solo no elige sino que debe decir “Sí” a quien pida su
mano.
La mujer debe solamente tener
cuidado de la casa y de sus niños, ya que su papel es construir una sociedad
islámica virtuosa.
El trabajo principal del
hombre es trabajar y gastar para la casa. Por eso el hermano hereda el doble
que sus hermana
El hombre tiene una
naturaleza diferente de la mujer, lo que es claro en su fuerza, ayudándolo a
realizar trabajos que no se pueden hacer por una mujer.
El Islam reconoce esas
diferencias y sus leyes las tomaron en consideración. Y el Corán lo deja bien
claro:
“Los hombres tienen
autoridad sobre las mujeres en virtud de la preferencia que Alá ha dado a unos
más que a otros y de los bienes que gastan” (El Sagrado Corán 4:34).
P.D.: Las 29 prohibiciones impuestas por los talibanes a las mujeres - Internacional - 24horas https://www.24horas.cl/internacional/las-29-prohibiciones-impuestas-por-los-talibanes-a-las-mujeres-894763
No hay comentarios:
Publicar un comentario